En los últimos años, los equipos de aerotermia se han convertido en una solución cada vez más popular. Una sistema de climatización más eficiente y sostenible que emplea la energía del aire para cubrir las necesidades de calefacción y refrigeración como las de agua caliente sanitaria.
Gracias a ello, podemos mantener nuestra casa a la temperatura ideal, independientemente de la época del año. Pero además, podemos disfrutar de un consumo energético más eficiente, lo que se traduce en facturas más económicas a largo plazo.
Con lo cual, los sistemas de aerotermia no sólo mejoran el nivel de confort de nuestro hogar, sino que, además, ayudan a reducir la huella de carbono, lo que los convierte en una opción mucho más amigable con el planeta.
¿Cómo funciona una instalación de aerotermia?
La aerotermia es un sistema de climatización que utiliza una bomba de calor para extraer energía del aire exterior y generar la temperatura deseada. Funciona de manera similar al aire acondicionado, pero a diferencia de este, la aerotermia no solo actúa como aparato de refrigeración, sino que también puede proporcionar calefacción y encargarse de la producción de agua caliente sanitaria. Siendo compatible con radiadores, suelo radiante o fancoils, por ejemplo.
La bomba de calor funciona mediante un ciclo termodinámico que implica la evaporación y condensación de un refrigerante, permitiendo que el sistema extraiga calor del aire, incluso en condiciones climáticas frías. A continuación, se describen los pasos clave del funcionamiento:
- Evaporación: el aire exterior pasa a través de una unidad exterior donde se encuentra el evaporador, que absorbe el calor del aire, haciendo que el refrigerante se evapore y se convierta en gas.
- Compresión: el gas refrigerante es comprimido por un compresor, aumentando su presión y su temperatura y permitiendo que el calor capturado sea utilizado de manera más efectiva.
- Condensación: el gas caliente y a alta presión se dirige a la unidad interior, donde se encuentra el condensador. Aquí, el refrigerante libera el calor al sistema de calefacción, que puede ser, por ejemplo, un suelo radiante, radiadores o fancoils.
- Expansión: por último, el refrigerante se expande, reduciendo su temperatura y presión, preparándolo para volver a comenzar el ciclo.
De esta forma, la aerotermia no solo garantiza que nuestra casa mantenga una temperatura agradable durante todo el año, sino que, además, aumenta considerablemente el nivel de eficiencia energética, permitiendo un importante ahorro en las facturas de energía.
¿Por qué instalar aerotermia?
Instalar un sistema de aerotermia en tu vivienda puede ofrecer numerosas ventajas. Si buscas ahorrar en tus facturas y estás comprometido con el planeta, este sistema es perfecto para ti.
1. Beneficios económicos y medioambientales
Uno de los principales beneficios de la aerotermia es la reducción de emisiones de CO2, lo que no sólo resulta beneficioso para el medio ambiente, sino que, además, puede suponer un gran ahorro en tus facturas de calefacción, refrigeración y agua caliente sanitaria.
Debido a ello, tanto el gobierno como las comunidades autónomas ofrecen subvenciones y ayudas para fomentar la instalación de sistemas de climatización con energías renovables, lo que puede reducir considerablemente el precio de la instalación de aerotermia.
2. Versatilidad en la climatización
La bomba de calor aerotermia puede adaptarse tanto a sistemas de calefacción tradicionales como los radiadores, pero también a otros más modernos como el suelo radiante. Esto significa que puedes disfrutar de un hogar cómodo durante todo el año, con calefacción en invierno y refrigeración en verano.
3. Mantenimiento y durabilidad
Por norma general, las bombas de calor de los equipos de aerotermia requieren de un mantenimiento mínimo en comparación con los sistemas de calefacción convencionales, lo que se traduce en menos preocupaciones a largo plazo.
Con un buen cuidado y revisiones periódicas, la vida útil de una bomba de calor puede llegar a superar perfectamente los 15 años, lo que la convierte en una opción fiable y a largo plazo para mantener una temperatura agradable en el interior de nuestra vivienda.
4. Ahorro a largo plazo
Es cierto que el precio de la instalación puede ser mayor que el de los sistemas tradicionales, pero los costes de funcionamiento a largo plazo compensan con creces. La eficiencia de las bombas de calor hace que el consumo de electricidad para la producción de calefacción y agua caliente sanitaria sea menor, por lo que las facturas son mucho más bajas.
5. Aumento del valor de la propiedad
Si estás pensando en vender tu casa, debes saber que la instalación de un sistema de aerotermia puede aumentar el valor de la propiedad debido a la creciente demanda de soluciones de calefacción y refrigeración más eficientes y menos contaminantes, lo que lo convierte en una magnífica inversión.
¿Cuánto cuesta instalar aerotermia? Precio aproximado
Por lo general, el precio de la instalación de aerotermia suele oscilar entre los 8.000 y los 15.000 euros. No obstante, debes saber que puede variar considerablemente en función del tipo de vivienda, la potencia requerida y el fabricante de la bomba de calor,
Y es que las demandas de calefacción, refrigeración y agua caliente sanitaria de una vivienda unifamiliar, un apartamento o una finca no son las mismas. Por ejemplo, una vivienda unifamiliar de 200 m² puede requerir una bomba de calor de mayor potencia, lo que aumentar hasta los 12.000-15.000 euros. En cambio, el precio para un apartamento más pequeño puede ser de entre 8.000 y 10.000 euros.
- Familia con alta demanda de agua caliente sanitaria: si tienes una familia grande que requiere de una elevada producción de agua caliente sanitaria (ACS), puede que necesites un sistema más potente o complementarlo con un acumulador, lo que puede aumentar el precio de la instalación hasta los 14.000 euros, dependiendo de la capacidad del acumulador y la bomba de calor que elijamos.
- Vivienda con suelo radiante: a la hora de instalar un sistema de aerotermia integrado con suelo radiante puede que se necesite un diseño específico, lo que puede costar entre 12.000 y 15.000 euros. Eso sí, aunque el precio inicial es mayor, hay que tener en cuenta que el suelo radiante ofrece un mayor nivel de confort y una distribución del calor más uniforme, lo que mejora notablemente la eficiencia energética.
- Propiedades en zonas frías: si vives en una región donde las temperaturas invernales son muy bajas, lo más probable es que necesites una bomba de calor de mayor potencia, lo que aumentará el precio de la instalación hasta los 15.000 euros o incluso más.
- Vivienda con espacios grandes y abiertos: si tu vivienda tiene habitaciones muy grandes y abiertas, puede que necesites un sistema de aerotermia más potente que pueda cubrir sin problema las necesidades de calefacción y refrigeración de toda la casa. En estos casos, el precio suele oscilar entre los 13.000 y los 17.000 euros.
En cualquier caso, aunque es cierto que el precio de la instalación de aerotermia suele ser más elevado que el de otras opciones de calefacción y agua caliente sanitaria, como las calderas de gas natural o los sistemas eléctricos, es importante tener en cuenta que los costes de funcionamiento, generalmente, son más bajos.
Con lo cual, a lo largo del tiempo, podrás amortizar la inversión gracias a la reducción de entre un 30 y un 50% en tus facturas de energía. Además, si la instalación se realiza correctamente y tus equipos reciben un mantenimiento adecuado, pueden llegar a durar muchos años, convirtiéndola en una inversión muy rentable.
Comparación del precio de la aerotermia con otros sistemas de calefacción
Al comparar el precio de la aerotermia con otros equipos de climatización, es evidente que cada posibilidad tiene sus ventajas e inconvenientes. Con lo cual, la elección del sistema dependerá principalmente de tus necesidades específicas, del tipo de vivienda y de tus prioridades en términos de ahorro y sostenibilidad. Por eso, siempre es aconsejable consultar con un profesional que pueda evaluar tu situación y ofrecerte la solución que mejor se adapte a tu vivienda.
1. Caldera de gas natural
Las calderas de gas son uno de los sistemas de calefacción y agua caliente más tradicionales. El coste de la instalación puede variar entre los 2.000 y los 5.000 euros, dependiendo del tipo de caldera y de la complejidad de la instalación.
Sin embargo, aunque el precio inicial es menor, la factura de consumo puede ser más elevada, especialmente si el precio del gas natural se encarece. Además, las calderas de gas no son la solución más sostenible a largo plazo.
2. Bombas de calor geotérmicas
Las bombas de calor geotérmicas, que utilizan la energía del subsuelo, tienen un precio de instalación que puede oscilar entre 15.000 y 30.000 euros. Este sistema requiere una inversión considerable, pero proporciona una eficiencia energética muy alta.
Eso sí, hay que tener en cuenta que la instalación es más compleja y requiere espacio para los intercambiadores de calor subterráneos. Con lo cual, la aerotermia sigue siendo una opción más factible y más económica.
3. Sistemas eléctricos
Los aparatos eléctricos, como los radiadores eléctricos o los aparatos de calefacción por infrarrojos, tienen un precio de instalación que puede ser bastante asequible, oscilando entre los 1.000 y los 3.000 euros.
No obstante, estos sistemas suelen tener un consumo mayor. Con lo cual, a pesar de su bajo coste inicial, a largo plazo, puede ser la opción más cara.
4. Aire acondicionado con bomba de calor
Los sistemas de aire acondicionado con bomba de calor no solo enfrían, sino que también pueden proporcionar calefacción, lo que los convierte en una solución todo en uno. El precio de instalación puede oscilar entre los 2.500 y los 6.000 euros, en función de su capacidad y de la complejidad de la instalación.
Además, hay que tener en cuenta que en zonas con inviernos fríos, la eficiencia del aire acondicionado puede verse reducida, llegando a disparar los costes de consumo.
5. Suelo radiante
El suelo radiante es un sistema de climatización que utiliza tuberías instaladas bajo el suelo para distribuir el calor de manera uniforme. El precio de la instalación puede variar entre los 40 y los 70 euros por metro cuadrado. Es cierto que no se trata de la opción más económica, pero sí una de las más eficientes y que mayor confort térmico proporciona, permitiendo mantener una temperatura muy agradable.
Además, el suelo radiante es compatible con sistemas de aerotermia y bombas de calor, lo que puede aumentar su eficiencia y reducir los costes de funcionamiento a largo plazo. Además, al no depender de radiadores, permite ahorrar espacio en las habitaciones y distribuir el calor de manera más equilibrada.
Factores que influyen en el precio de la aerotermia
Para obtener un presupuesto lo más ajustado posible, es importante que sepas cuáles son los factores que influyen a la hora de instalar aerotermia.
Tamaño y tipo de vivienda
El tamaño de la vivienda es uno de los factores que tienen más peso en el precio final. Una vivienda unifamiliar grande requerirá un sistema más potente y, por lo tanto, más costoso. Por ejemplo, una casa de 200 m² necesitará una bomba de calor de mayor capacidad que un apartamento de 80 m².
Además, si tu casa cuenta con sistemas de calefacción ya existentes que puedan integrarse con la bomba de calor de aerotermia, como radiadores o suelo radiante, el precio de la instalación podría reducirse.
Potencia de la bomba de calor
La potencia de la bomba de calor también influirá en el precio de la aerotermia. Generalmente, las bombas de calor con mayor capacidad tienen un coste más elevado. Sin embargo, es fundamental elegir una unidad que se adapte al consumo de la vivienda. Si eliges una bomba que no sea lo suficientemente potente tanto la eficiencia del equipo como su rendimiento podrían verse afectados, dando lugar a un mayor consumo energético y un menor confort térmico.
Tipo de instalación
La complejidad de la instalación de aerotermia también puede influir en el precio. Si es necesario realizar modificaciones estructurales, como la instalación de un sistema de suelo radiante o la integración con los radiadores de calefacción existentes, el coste total aumentará. En cambio, una instalación más sencilla, que implique simplemente reemplazar una unidad antigua por una nueva, puede resultar más económica.
Ubicación geográfica
El lugar donde esté ubicada tu vivienda también puede afectar al precio a la hora de instalar aerotermia. En algunas zonas, la competencia entre las empresas puede ser mayor, lo que puede hacer que los precios sean más bajos. Sin embargo, en zonas rurales o menos pobladas, los costes de instalación pueden ser más elevados debido a la menor disponibilidad de técnicos especializados y a los mayores costes de transporte de los equipos.
Facilidad de acceso
La facilidad de acceso al lugar en el que va a realizarse la instalación de aerotermia es otro factor que debemos tener en cuenta. Si el acceso es complicado o se requiere de maquinaria especial, como grúas o elevadores, los costes pueden aumentar. Por ejemplo, una vivienda ubicada en el campo o en una zona con malas carreteras puede requerir de medidas adicionales para la instalación, lo que puede elevar el precio.
Eficiencia energética de la unidad
Por lo general, una bomba de calor con un consumo más bajo suele ser más económica. Sin embargo, esta inversión puede resultar muy rentable a largo plazo debido al menor consumo energético, haciendo que las facturas de electricidad sean más bajas. Por eso, lo más recomendable es elegir un modelo eficiente.
Mantenimiento y garantías
El precio de mantenimiento y las garantías ofrecidas por el fabricante también son factores que influyen en el precio de la aerotermia. Algunos sistemas pueden incluir planes de mantenimiento a largo plazo o garantías extendidas que, aunque pueden aumentar el precio inicial, proporcionan un extra de seguridad. No hay que olvidar que un buen mantenimiento puede alargar la vida de la bomba de calor y garantizar un óptimo rendimiento a lo largo del tiempo.
Subvenciones y ayudas
Tanto a nivel nacional como por parte de las comunidades autónomas existen programas que promueven el uso de energías verdes a través de la concesión de subvenciones y ayudas económicas, lo que puede ayudarnos a reducir el precio total de la instalación, haciéndola más asequible.
Personalización del sistema de aerotermia
Si decides añadir características o accesorios adicionales, como un acumulador de agua caliente sanitaria o los controles inteligentes para la gestión del sistema, el precio total de la instalación puede aumentar. Eso sí, este tipo de opciones pueden aumentar considerablemente el nivel de eficiencia y confort térmico, por lo que es importante valorar si a largo plazo pueden compensar.
Aspectos a tener en cuenta al pedir presupuesto para instalar aerotermia
No te quedes con la primera oferta que recibas. Es recomendable que compares varias opciones antes de tomar una decisión. De esta forma, podrás tener una mejor idea del mercado y negociar precios y condiciones.
Sin embargo, recuerda que el precio no siempre es lo más importante, sino que también debes tener en cuenta la calidad del servicio y la reputación de cada empresa.
En este sentido, cuando consultes con distintas empresas el precio para la instalación de aerotermia, es fundamental que tengas en cuenta ciertos aspectos para tener la seguridad de que estás realizando la mejor elección.
1. Características del equipo
El presupuesto debe incluir información específica sobre el tipo de bomba de calor, su potencia y el consumo de energía. Pregunta si se trata de una bomba de calor aire-agua o aire-aire, ya que esto influirá en su rendimiento y en el coste de tus facturas.
La etiqueta energética del equipo de aerotermia te ayudará a comparar distintas marcas y modelos, permitiéndote optar por un sistema que no solo cubra tus demandas de calefacción y refrigeración, sino que también ofrezca un consumo de energía eficiente.
2. Precios desglosados
Solicita un desglose detallado de los precios, que incluya la instalación, el equipo y los accesorios necesarios. De esta forma, podrás identificar qué partes del presupuesto son fijas y cuáles pueden ser negociables, y cambiar o eliminar aquello que consideres que no necesitas o que se sale de tu presupuesto. Pero también podrás evaluar si estás obteniendo un precio justo en relación a la calidad y el servicio ofrecido.
3. Experiencia del instalador
Investiga la reputación y la experiencia del instalador. Es recomendable elegir un profesional que cuente con varios años de experiencia en sistemas de aerotermia, de manera que puedas tener la tranquilidad de que la instalación se realizará correctamente y de que el sistema funcionará sin problema a largo plazo.
4. Tiempo de instalación
El plazo de la instalación puede variar en función de la complejidad del aparato y las características de tu vivienda. Pregunta sobre el tiempo estimado para completar la instalación. Una empresa fiable te proporcionará un planning claro para que puedas organizarte mejor. Asegúrate de que el instalador sea realista sobre los plazos y que cumpla con el calendario acordado.
5. Garantías y servicio postventa
Para garantizar la durabilidad de tus sistemas de aerotermia es fundamental contar con un buen soporte técnico y trabajos de mantenimiento periódicos. Y es que un buen servicio postventa puede ser decisivo a la hora de solucionar cualquier inconveniente que pueda surgir tras la instalación.
Por eso, es recomendable que el presupuesto también incluya información sobre garantías del equipo y los servicios postventa. Infórmate sobre las condiciones de la garantía, qué cubre y por cuánto tiempo.
6. Subvenciones y ayudas disponibles
Infórmate sobre posibles subvenciones o ayudas que puedas solicitar para abaratar el coste del equipo. Un instalador profesional puede asesorarte al respecto.
7. Referencias y opiniones
Pide referencias de clientes anteriores o busca opiniones online sobre la empresa instaladora. De esta forma, podrás hacerte una idea sobre la calidad del trabajo y el nivel de satisfacción con el trabajo realizado. Proporcionándote información muy valiosa sobre el trato del instalador, el cumplimiento de los plazos y la eficacia del equipo una vez instalado.
¿Cuánto se tarda en amortizar la inversión de una instalación de aerotermia?
Por lo general, el tiempo necesario para realizar amortizar una instalación de aerotermia es de entre 5 y 10 años. Sin embargo, hay ciertos factores como el precio de instalación, el ahorro en la factura de energía y la posibilidad de solicitar subvenciones que hacen que el precio pueda variar.
Precio de instalación
Como decíamos antes, el precio de instalación de un equipo de aerotermia puede variar entre 8.000 y 15.000 euros. Con lo cual, el plazo de amortización dependerá mucho del coste de la inversión.
Ahorro en la factura
Comparado con otros sistemas tradicionales, como las calderas de gas o los aparatos de aire acondicionado, se calcula que una instalación de aerotermia puede reducir el coste de producción de agua caliente sanitaria y calefacción entre un 30% y un 50%.
Esto significa que, si una familia gasta anualmente 1.200 euros en calefacción con una caldera de gas, ese gasto podría disminuir a entre 600 y 840 euros gracias a la aerotermia. Este ahorro se acumula a lo largo de los años, acelerando el retorno de la inversión.
Periodo de amortización
Si tenemos en cuenta un ahorro anual promedio de aproximadamente 400 euros, se podría estimar que la recuperación completa de una inversión de 12.000 euros podría llevar hasta 30 años. Sin embargo, si el ahorro real es mayor, por ejemplo, 800 euros al año, el tiempo necesario para recuperar la inversión se acortaría a unos 15 años. No obstante, como decíamos, en la mayoría de los casos, la amortización se consigue entre los 5 y los 10 años.
Durabilidad y mantenimiento
Los sistemas de aerotermia son duraderos y requieren un mantenimiento relativamente bajo. Con un mantenimiento adecuado, estos sistemas pueden tener una vida útil de entre 15 y 20 años o incluso más. Esto quiere decir que, una vez recuperada la inversión, podrás disfrutar de muchos años de ahorro.
¿Cómo abaratar el precio de la aerotermia?
Al instalar aerotermia, podemos reducir el precio de la instalación a través de diferentes estrategias, desde aprovechar subvenciones y comparar precios, hasta elegir sistemas más eficientes o negociar con las empresas instaladoras. Pero no sólo podemos reducir el precio inicial, sino también lograr un mayor ahorro en la factura a largo plazo.
1. Subvenciones y ayudas
Una de las formas más eficaces de reducir el coste de la instalación es aprovechar las subvenciones disponibles. En España, el gobierno ofrece ayudas que pueden llegar a cubrir entre un 20% y un 50% del coste total de la instalación para los sistemas de calefacción y refrigeración que utilicen cualquier tipo de energía renovable, como es el caso de los sistemas de aerotermia.
Por ejemplo, si la instalación cuesta 10.000 euros y podemos llegar a obtener una subvención del 50%, nuestra inversión se reduciría a 5.000 euros.
2. Comparar de presupuestos
Para encontrar la mejor oferta, es fundamental solicitar presupuestos de diferentes empresas. Comparándolos, es normal llegar a encontrar diferencias de entre el 5% y el 15% del precio por el mismo servicio. Si una empresa ofrece la instalación por 9.000 euros y otra lo hace por 8.500 euros, puedes ahorrarte ese dinero para cubrir otros gastos o para mejorar la calidad de los aparatos elegidos.
3. Eficiencia del sistema de aerotermia
Aunque a priori, optar por sistemas de aerotermia más eficientes puede parecer más costoso, a largo plazo, se traduce en un importante ahorro. Por ejemplo, los sistemas de aerotermia de alta eficiencia pueden reducir los costes de energía hasta un 50% en comparación con sistemas tradicionales, como las calderas de gas. Si tu factura de calefacción anual es de 1.200 euros, pasar a un sistema más eficiente podría reducirla a alrededor de 600 euros, por lo que podrás ahorrar 600 euros al año.
4. Instalaciones en conjunto
Realizar mejoras en la vivienda de forma simultánea también puede suponer un gran ahorro. Por ejemplo, si decides instalar paneles solares junto con tu sistema de aerotermia, algunas empresas pueden ofrecer descuentos de entre el 10% y el 15% en el total del proyecto. Si el coste combinado de ambas instalaciones es de 20.000 euros, podrás ahorrar hasta 3.000 euros simplemente por hacer ambas al mismo tiempo.
5. Mejora de la eficiencia energética de la vivienda
Antes de instalar un sistema de aerotermia, es esencial asegurarte de que tu vivienda esté bien aislada. Invertir en aislamiento y ventanas de alta eficiencia puede disminuir la potencia requerida por el sistema, lo que también reduce el precio de instalación.
Una vivienda que requiera una bomba de calor de menor potencia puede experimentar un ahorro de hasta un 20% en el coste de instalación. Además, un consumo más bajo se traduce en menos gastos anuales en la factura de calefacción y ACS, aumentando aún más el retorno de la inversión.
6. Elegir el tipo correcto de instalación
La elección del tipo de sistema también influye en el precio. Por ejemplo, un sistema de aerotermia aire-agua, generalmente, suele ser más asequible, con precios de instalación que pueden oscilar entre 8.000 y 12.000 euros, mientras que un sistema geotérmico puede costar entre 12.000 y 20.000 euros. Si te preocupa el presupuesto, puede que resulte más viable optar por un sistema aire-agua.
7. Promociones y ofertas especiales
Mantente alerta a promociones o descuentos que puedan ofrecer las empresas de climatización. Muchas veces, es posible encontrar ofertas que pueden reducir el precio entre un 10% y un 20%. Por ejemplo, si el precio de la instalación de aerotermia es de 10.000 euros, con una oferta del 20%, podría quedarse en 8.000 euros.
8. Negociación con el instalador
Hablar abiertamente sobre tu presupuesto también puede abaratar el precio de la instalación. Muchas empresas están dispuestas a ajustar su presupuesto o a mejorar su oferta inicial para cerrar el trato. Por ejemplo, si consigues un descuento del 5% en una instalación de aerotermia de 10.000 euros, podrás ahorrarte 500 euros.
¿Cómo elegir a la mejor empresa para realizar la instalación de aerotermia?
Para que el montaje sea de calidad y el sistema funcione de manera eficiente, es importante elegir una empresa adecuada. En este sentido, a continuación, te explicamos algunos aspectos que deberías tener en cuenta:
1. Experiencia y reputación
Investiga sobre la experiencia y la reputación de las empresas que estás valorando. Busca opiniones y referencias de otros clientes en plataformas de reseñas y foros para obtener una visión objetiva de la calidad de su servicio. De esta forma, podrás conocer sus experiencias y comprobar si la empresa cumple con lo prometido.
2. Certificaciones y marcas de sistemas de aerotermia
Pregunta si la empresa cuenta con certificaciones que garanticen su profesionalidad y si trabaja con marcas reconocidas, ya que esto es un indicativo de que la empresa ha recibido formación específica y que cumple con normativas de calidad y seguridad. Además, optar por marcas reconocidas te proporcionará una mayor tranquilidad sobre la durabilidad y el rendimiento del equipo.
3. Presupuesto claro y detallado
Es importante que la empresa te proporcione un presupuesto claro y detallado, donde se incluyan los costes de la instalación, la marca del equipo y los accesorios necesarios. De esta forma, evitarás sorpresas desagradables al final del proceso. Además, un presupuesto transparente es una señal de que la empresa es profesional y que ofrece un servicio de calidad.
4. Servicio postventa y mantenimiento de tu equipo de aerotermia
Un buen soporte técnico y mantenimiento son fundamentales para el rendimiento óptimo de tu sistema de aerotermia. Por eso, es importante que consultes si la empresa ofrece un servicio postventa y opciones de mantenimiento.
Pregunta sobre los planes de mantenimiento que ofrecen y la disponibilidad de servicio técnico en caso de que surjan problemas tras la instalación. Gracias a ello, podrás alargar la vida útil de tu equipo y garantizar que funcione perfectamente a lo largo del tiempo.
5. Evaluación personalizada
Es importante que la empresa realice una valoración personalizada de tu vivienda antes de instalar el sistema y un análisis de tus necesidades específicas y de las condiciones climáticas de tu zona.
Además, algunas empresas ofrecen la posibilidad de realizar un estudio térmico para determinar la capacidad necesaria del sistema, lo que puede ser determinante para la eficiencia y confort de la vivienda. De esta forma, podrás tener la seguridad de que tu sistema de aerotermia se adaptará perfectamente a tus requerimientos.
6. Conocimiento de normativas municipales
Para evitar problemas futuros, tanto en términos de seguridad como de legalidad, asegúrate de que la empresa conozca las normativas municipales sobre la instalación de aparatos de aerotermia, tanto en lo que respecta a los requisitos como a los permisos necesarios. De esta forma, podrás ahorrarte tiempo y complicaciones en el futuro.